Louis Alphonse Poitevin incorpora, en 1855, el pigmento a los coloides bicromatados, inventando el primer proceso pigmentario (proceso al carbón, goma bicromatada, gelatina bicromatada, etc.) Dentro de los procesos pigmentarios, la goma bicromatada alcanzó la mayor popularidad. Aunque fue en 1858 cuando se exhibió la primera goma bicromatada (obra del inglés John Pouncy), este proceso fue especialmente apreciado y utilizado por el movimiento Pictorialista, una corriente estética muy apreciada por los fotógrafos durante los años 1880-1920, debido a que les permitían trabajar las copias a su antojo, obteniendo imágenes cuya apariencia resultaba más de un grabado o de un dibujo que de una fotografía.

Entre los fotógrafos que utilizaron este proceso destacan A. Maskely y R. Demachy (que juntos, en 1898, publicaron un tratado sobre la goma bicromatada), C. Puyo y E. Steichen.

¿Qué es una goma bicromatada?

El proceso a la goma bicromatada, es una copia positiva. Consiste en extender, sobre una hoja de papel de bellas artes, una solución, compuesta de goma arábiga, bicromato potásico y pigmento. Una vez seco, el papel en contacto con el negativo (al tamaño de la imagen final), se expone al sol; la luz hace insoluble la goma bicromatada que retendrá el pigmento. Durante el revelado/despojamiento, el cual se realiza en agua, la goma arábiga se desprende, en mayor o menor medida dependiendo de la cantidad de luz recibida, produciendo de esta manera una imagen positiva del color del pigmento utilizado.